Cuento de Navidad::Una Historia en las Nubes a través de mis gafas

Nube Gris era guapo,

apuesto, joven y muy valiente. de ahí que debido a su juventud y valentía fuera nombrado por el Consejo de Nubes ancianas, jefe de su formación de nubes a la que pertenecía allá en el mundo del firmamento.

Su nuevo trabajo consistía en ir siempre armado hasta los dientes, con truenos, relámpagos y rayos, además de ir siempre con su depósito lleno de agua para cuando recibiera la orden de hacer uso de todo su armamento, estuviera todo listo para actuar. Nube Gris era generoso, siempre dispuesto a proteger a los más débiles, por lo que era muy querido por todos sus amigos.

Nube Gris llevaba algún tiempo con una idea rondándole la cabeza: formar una familia, sobre todo desde que conoció a Nube Blanca que era preciosa,muy bien formada y siempre con una bonita sonrisa en sus labios; Nube Blanca siempre iba delante de él y él aprovechó aquel día una ráfaga de aire y se colocó al lado de ella para decirle que estaba enamorado de ella, Nube Blanca le confesó que ella también estaba enamorada de él , Nube Gris la envolvió con sus poderosos brazos sintiéndose la Nube más feliz del mundo ,

se casaron y a partir de aquel día ya no se separaron, siempre iban juntos en la formación.

CIRRO Y SU MADRE

Nube Blanca tuvo un hijito al que llamaron por nombre Cirro: Cirro era como un pequeño cojín esponjoso blanco y con filamentos que parecían encajes; sus padres lo adoraban aunque lo vigilaban mucho porque era muy travieso y le gustaba curiosear a los seres humanos allá abajo en la tierra, se entretenía  mirándolos en su ir y venir. Un día que estaba mirando hacia abajo observó que allí estaba ocurriendo algo muy raro, había mucha gente que iba en tropel hacia un mismo sitio, iban hacia una cueva que despedía una potente luz, como si una Estrella hubiera descendido del firmamento.Cirro corrió a contárselo a su madre y le pidió que bajara con el a la Tierra a ver que pasaba , Nube Blanca se lo comentó a su marido y este echó un vistazo, vió que aquel tropel de gente no ofrecía peligro porque estaban contentos y cantaban les dijo que podian bajar tranquilos.

Nube Blanca cogió a Cirro de la mano, bajaron en el ascensor de la Niebla y cuando llegaron a la cueva vieron que era un establo para animales donde estaban descansando una mula y un buey, al lado estaba un hombre con barba y un cayado en la mano, sobre unas pajas había un bebé recién y desnudito, su madre ( casi una niña) trataba de tapar al Niño con su manto, pero Cirro de un salto se puso encima tapándolo con su cuerpo, la madre miró a Cirro y le sonrió con una sonrisa tan dulce que Cirro sintió que todo su ser se estremecía igual que le pasaba a él cuando su madre lo besaba. Cirro dirigió sus ojos hacia el Niño, que a su vez lo miraba a el ; cuando sus miradas se cruzaron Cirro sintió como la mirada del Niño penetraba hasta su propia alma con un calor especial y Cirro se preguntaba ¿ quién era esta familia tan especial que estaba en aquella cueva que servia de establo? ¿quiénes eran aquellos pastores, gentes humildes que le traían regalos al Niño?¿ quiénes eran aquellos 3 Reyes que acababan de entrar en la Cueva, postrándose de rodillas ante el Niño ofreciéndoles oro, incienso y mirra? y sobre todo ¿ quién era aquel Niño ante quién se arrodillaban las gentes humildes y los Reyes de la Tierra?.

Le preguntaría a sus padres, ellos lo sabían todo, de momento tenía mucho sueño, miró al Niño que se había quedado dormido y él se acurrucó a su lado y se durmió también , se estaba tan calentito y tan a gusto al lado de aquel Niño.........Su madre cuando lo vio dormido lo cogio en sus brazos, cogió el ascensor de la Niebla y para cuando llegaron a casa ya Cirro se había despertado, sus padres hablaron de lo sucedido, Cirro pregunta a su padre quién es aquel Niño, su padre le contesta sencillamente que aquel Niño es Dios. Cirro pregunta si era el Dios del que hablaba la "seño" en el cole cuando decía que Dios castigaba a los malos, su padre sonríe y le dice que no, porque el Niño Dios es el Amor  y el Amor no entiende de castigos ni de rencores, solo desea Paz y Bien para las personas de buena voluntad, que el Amor siempre perdona porque El es todo ternura y su Misericordia es Eterna.

Cirro escucha a su padre embelesado mira hacia dentro de su pecho y ¡¡¡Allí está el Niño mirándolo sonriente, despidiendo aquel calorcillo tan especial!!!

                                  FIN

Este cuento lo he escrito con todo cariño para mi amiga Mª Carmén Garcia Franconetti, a la que le gustan tanto mis cuentos, a la vez le felicito las próximas Fiestas,  asi como a todos los seguidores de mi blog, deseándoles a todos que la PAZ y el BIEN acampe entre ellos.