viernes, 21 de diciembre de 2012

Los lagos de Covadonga a través de mis gafas.

 
Los Picos de Europa en su parte occidental tiene preciosas sierras y praderas de gran belleza. El Macizo de Cornión es el más extenso de esa parte  de Los Picos de Europa y precisamente en este macizo es donde está el Parque Naconal de Covadonga y los valles del Dobra y del Sella que se forman por el este y el sur en los límites del Concejo de Cangas; las condiciones de la altura y orientación de estos parajes le hacen tener distintos tipos de vegetación; según se va descendiendo de altitud se ven plantaas alpinas y líquenes, más abajo brezos y matorrales, a los que le siguen robles, hayas y fresnos, algo más abajo nos encontramos con las vegas de los ríos Sella y Güeña. Esta maravillosa vegetación se completan con bosques, pastizales y matorrales.
Allá arriba a 2,478m, sobre el nivel del mar está la "guinda" que "adorna" este expléndido paisaje,; los lagos de Covadonga que estan formados, por dos pequeños lagos, el Enol y el Ercina, de origen glaciar, hay otro lago pequeño, que sólo tiene agua durante el deshielo. Estos tres lagos pertenecen al Concejo de Cangas de Onis y se accede a ellos a través de una carretera que parte desde Covadonga. Recuerdo aquella carretera  con muchas curvas y por la que había que ir con mucho cuidado, no sólo por las curvas sino porque, alguna que otra vez, se encontraban 4 o 5 vacas paseando tranquilamente por la carretera, había que parar el coche hasta que pasaran, ellas nos miraban con ojos  un poco enfadados, creo que porque estaban viendo invadidos su entorno habitual. En verdad era un espctáculo divertido; llegué a pensar si no estarian al servicio de Turismo para alegrar la subida, por fin llegamos a los lagos. Había oido hablar tanto de ellos que sentía una enorme ilusión. Siempre suelo hablar de mi gran pasión por los espacios abiertos y la Naturaleza , en estado puro, y ver aquellos paisajes, fue para mi, una explosión de luz y color que jamás olvidaré. Hicimos un inolvidable recorrido por todo aquello, 1º vimos el lago Enol, es el más grande, luego llegamos al Ercina, por todos lados hay senderos  para hacer senderismo, con un paisaje sencillamente espectacular, ya pasado el mediodía, sentimos hambre y volvimos al Enol porque más arriba habíamos visto una casita rustica donde nos habian dicho que se podía comer algo. Miguel y un compañero, que había venido con nosotros, subieron en el coche hasta la casita por una pequeña carretera, yo dije que prefería subir por una ladera cubierta de hierba, tremendamente verde, que me llegaba a las rodillas y donde disfruté como una niña cuando mis pies se hundieron en la hierba y el olor a hierba fresca subía hacia mi como el mejor de los perfumes¡¡Dios que placer!!.
Cuándo llegué a la casita( que resultó ser una pequeña venta) Miguel y el compañero ya estaban sentados esperándome para pedir la comida, pero yo preferí que me preperaran algo para comer fuera, quería "empaparme" de todo el maravilloso paisaje que me rodeaba. Me preperaron un buen bollo relleno de queso de Cabrales, que me encanta y una rica cevecita, que me llevé fuera, busqué un sitio más solitario, me senté en una piedra y mientras comía, miré todo lo que me rodeaba; frente a mi estaba la verde ladera por la que había subido y allí abajo, el Enol con sus aguas cristalinas que relucian como estrellitas doradas gracias al expléndido sol que hacía aquel día. Allá arriba al frente, las montañas con sus imponentes rocas, entre ellas, el glaciar de blanca nieve que alimenta los lagos; a mi alrededor todo era silencio, solo alterado por un impeceptible aire, el graznido de algun ave y el mugido de alguna vaca que pastaba por allí. Pero lo que más me atraía era el color; el color de aquel sol, el azul intenso del cielo y el más intenso verde del campo. Pensé que por muy buenos que sean los pintores, no hay pincel que pueda plasmar la paz que daba aquel silencio y el olor inigualable que traía el aire. Sólo hay un Artista capaz de lograr eso ; el mismo que lo creó: Dios: Allí se podía "palpar" el Amor de un Ser que nos regalaba aquella Naturaleza maravillosa.
A Miguel le costó trabajo "arrancarme" de allí, yo le decía" por favor, por favor, un ratito más", y el que es tan bueno accedía, para finalmente ponerse serio y tuve que irme; no me importó porque ya había "grabado " en mi alma todos y cada uno de los detalles de aquel mágico paisaje que me había llenado de una paz dificil de explicar con palabras. Sólo puedo decir, que a trevés de los años cuando me siento intranquila o angustiada, entro en mi dormitorio, me siento en una silla, cierro los ojos y miro dentro de mi, y allí está quel paisaje, su color y su olor, como el primer día que lo vi y cuando lo contemplo, vuelve a mi aquella paz y serenidad que me calma.
Estoy convencida de que el paisaje de los lagos de Covadonga se ha convertido en mi taliman, porque son un bálsamo para mi.

2 comentarios:

  1. Que bonitas palabras,
    Feliz navidad y besos
    Angeles

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  2. MÁS BONITAS SON TUS CARIÑOSAS PALABRAS QUE ME HABLAN QUE ES UNA SUERTE TENER UNA AMIGA COMO TU. UN BESO PARA TI

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